Gabriel Eduardo Amador, candidato a la Alcaldía de Polonuevo, Atlántico, sigue prófugo de la justicia sin declinar a sus aspiraciones. Contra el médico fue confirmada el pasado 4 de octubre una condena de 28 meses de prisión por peculado por apropiación y falsedad en documento público, debido a presuntas irregularidades que se cometieron en su pasada administración al no culminar unas obras del polideportivo y la falsificación de una firma para cobrar un cheque.
Desde ese momento, existe una orden de captura en su contra para que pague la condena en centro carcelario. Sin embargo, nadie conoce su actual paradero. Mientras que ‘el candidato fantasma’, como le llaman algunos aparecerá en el tarjetón este 29 de octubre, ha sido su esposa, Karen Pérez, quien se ha echado la campaña al hombro, como quedó evidenciado en la tarima el pasado domingo. El futuro del médico de profesión se ha enredado aún más, luego de tener diferencias con su abogado, quien, como representante legal, le retiró el recurso de casación ante la Corte Suprema de Justicia.
A pesar de su condición jurídica, Gabriel Eduardo Amador cerró su campaña proselitista de una manera poco inusual, pues lo hizo a través de un video proyectado para que sus seguidores, quienes salieron a caminar el municipio, no se perdieran ni un detalle de su mensaje.
De llegar a ganar las elecciones, Amador no podrá posesionarse, lo que llevará a que la Gobernación del Atlántico designe un alcalde encargado mientras se realizan nuevas elecciones.