¡Qué revista tan taimada que es “Cambio”!, ¡qué serpiente tan sagaz que es Coronell!
Por estos días se comenta mucho el cuento de que Abelardo De La Espriella, el filipichin más trepador y ridículo de Colombia, fue en su juventud, antes de la fama, el dinero y el avión privado, corista del conjunto de Iván Villazón, hecho que Abelardo ahora niega, quizá porque se avergüenza de unos orígenes tan modestos que no quedan bien con la idea que él tiene de si mismo ahora, esa de patriarca italiano trasplantado a orillas del Sinú, y re-trasplantado a orillas del Río Miami, en donde ahora es dueño de un bufete legal internacional exitoso (o eso dice él) y en donde dobla como restauranteur de comida mediterránea.
La realidad es que yo veo otras cosas, más allá de la perenne ridiculez de Abelardo, quien sufre con que se conozca su pasado como sufre todo trepador social.
Coronell, en días recientes, parece bastante tocado por el hecho de que el Presidente Petro haya cancelado su visita a Suiza en el marco de la dizque gran conferencia de paz para Ucrania que se celebró en días recientes en Lucerna.
Primero, saca una artículo extensivo durante el fin de semana intentando enjuiciar a Petro por no haber asistido a la conferencia de Lucerna y haber dejado a los americanos, los grandes impulsores con los suizos de esa payasada, con los crespos hechos. Para los que no saben el tamaño del fracaso de dicha conferencia, baste decir que solo 82 de 146 países invitados asistieron a dicha conferencia, y de esos 82 solo 78 firmaron el comunicado final: los 44 países de Europa, una docena plus de América (mucha isla del Caribe), y el resto de Oceanía y algo de Asia. En resumen, la reunión fue un fracaso estruendoso, ningún país de BRICS firmó, y la misma Kamala Harris llegó, firmó y se fue para no precidir sobre un fracaso absoluto que no llevó a nada.
Pero a los americanos les interesaba presentar dicha reunión como un gran éxito, y pusieron a todos los medios a su servicio a criticar a los ausentes y a promocionar el dizque “éxito” de la reunión.
Como “Cambio” es claramente un instrumento de los gringos en Colombia, Coronell y su tropita de periodistas solapados de Cambio se pusieron en la tarea de maquillar la conferencia y darle palo a Petro por no asistir.
Primero, artículo criticando las razones dadas por Petro para su ausencia. Segundo, artículo hablando del “éxito” de la conferencia. Y, tercero, una nota con profunda mala leche en donde cuentan que Verónica Alcocer, la Primera Dama, si fue a Suiza, pero que lo hizo con su propio dinero y no en visita oficial, quizá con la intención de dejar sembrada entre la gente una duda de si Verónica había ido a pasear con plata oficial.
Ahí lo tienen todo-en-uno para que vean cómo funciona el periodismo hábil y torcido en el mundo: (1) crítica a Petro por no asistir; (2)mentiras para maquillar el fracaso de esa conferencia; (3) y nota de desprestigio para la primera dama, para joder en algo a la familia presidencial. Ahí tienen ustedes el “sistema Cambio” en un evento, ahí tienen ustedes un ejemplo perfecto de cómo una prensa comprada funciona. Es una manipulación sutil, casi invisible, pero que tipos como yo si la perciben.
Ahora, un zorro viejo como Coronell no puede salir con semejante estrategia de desprestigio contra el Presidente, por órdenes de los americanos, sin NEUTRALIZAR LA CRÍTICA EN LA CABEZA DE LOS LECTORES DE IZQUIERDA con algún “caramelo”. Es decir, el juego de Coronell, como ya lo he explicado por aquí anteriormente, es meter su agenda, que es la misma agenda de los americanos, con “caramelo” para que su agenda pase por debajo del escrutinio público sin ser criticada. Es una jugada inteligente, pero ya yo tengo descifrado a ese hijueputa, y ya entiendo como opera. Les voy a dar un ejemplo: Coronell y Cambio le dan palo a Petro por algo, y esa misma semana el man saca un artículo sobre Uribe, a sabiendas de que cualquier cosa que diga de Uribe se va a llevar la atención y así, esta historia le va a tumbar trocha a su historia criticando a Petro, que va a pasar el escrutinio sin afectarlo a él. Mientras Coronell le este pegando a alguien que él sepa que los colombianos de izquierda odian, el man va a seguir metiendo su crítica taimada a Petro con esa cortina de humo hecha de lo que la izquierda odia.
Y aquí es en donde volvemos a Abelardo. Como no debía haber nada que decir sobre Uribe esta semana, Coronell no tenía “caramelo” con el cual hacer cortina de humo para su crítica velada a Petro por lo de su ausencia a la conferencia de Lucerna, así que le tocó echar mano de Abelardo para usarlo como caramelo, y ahí lo tienen: todo el mundo hablando de Abelardo y otra vez Coronell haciendo puntos con la izquierda, cuando ese hijueputa judío taimado es el crítico y el enemigo más acérrimo de Petro, mandado por sus jefes, los americanos , los que le recibieron a su hija en Harvard y los que lo tienen de ficha clave para las noticias en el mercado hispano de ese país.
Ustedes están cayendo en el juego de Coronell, y el man esta sacando adelante su agenda anti-Petro, porque, a punta de “caramelos” como Uribe y Abelardo, el man mantiene su credibilidad entre la izquierda.
Es decir, el gran miedo de Coronell es que le pase lo que le pasó a Vicky Dávila y a Claudia Gurisati, periodistas cuya parcialidad las descalificó del periodismo serio en donde ya nadie les cree. Para mantener su dizque “parcialidad” noticiosa, Coronell le da caramelo a sus lectores, y estos caen en su juego y compran. Mientras el man le siga dando palo a Uribe, al abogado Cadena, a Abelardo, y al resto de payasos del uribismo, el man sigue teniendo credibilidad y habrá el que lo defienda en la izquierda.
Pero el man acaba de meterle 3 palazos a Petro en su revista vendida, y ustedes ni se acaban de dar cuenta por seguir el estupido cuento de Abelardo, que domina todos los comentarios en redes. En otras palabras, ustedes se tragaron a Abelardo con patatas, y dejaron que ese malparido le metiera 3 palazos a Petro.
Abelardo no amerita dos líneas por aquí, pues ese man es un idiota, un arribista bufón. Abelardo no tiene ningún linaje italiano distinguido ni nada de eso, Abelardo es un cretino. Su historia no es diferente a aquella de cualquier otro nuevo rico con gustos un tanto lobos.
Y esos “De La Espriella” de Abelardo tampoco es que sea la rama más distinguida de esa familia. Yo conozco a algunos De La Espriella de Cartagena y estoy seguro que están avergonzados de ese payaso. Abelardo es un tipo de provincia, de clase media, que buscó por todos lados para trepar, hasta que lo logró. Gracias a su falta de clase obvia y a lo explícito de su trepada, se ha convertido en un bufón, en un objeto de burla. Todo el mundo se burla de sus pintas, de su imagen de filípichin, de su Rolex, de su avión, de su restaurante, y de sus gustos de nuevo rico. Abelardo es un chiste en los círculos sociales más refinados, se los digo yo. Pero es más malo Coronell, pues ese gusano taimado esta usando a ese “chiste” para seguir una agenda trazada por los americanos, una agenda que a largo plazo puede joder los destinos de Colombia.
Abelardo no lástima a Colombia con su ridiculez, ese man ya es un chiste. Coronell si tiene el poder y la intención de joder a Colombia para favorecer los interés suyos y los de sus amos del Norte. A eso es a lo que hay que ponerle atención, no a Abelardo.
Total, haber sido “ayombero” del conjunto de Iván Villazón solo añade leña al rol de bufón de Abelardo, solo añade “carne” a la leyenda sobre su ridiculez, y eso es divertido.
Lo que hace Coronell para los americanos, usando a Abelardo, no es divertido.
No solo no es divertido sino que es siniestro…