La Defensoría del Pueblo entregó el informe de los líderes y lideresas sociales y defensores de derechos humanos que fueron asesinados en Colombia durante 2022. De acuerdo con la entidad, el año pasado se reportó la cifra más alta en los últimos siete años, especialmente por el incremento de los enfrentamientos entre grupos armados en zonas estratégicas para el narcotráfico.
Según lo reportado por el Sistema de Alertas Tempranas (SAT), hubo 215 homicidios en 2022. El defensor del Pueblo, Carlos Camargo, indicó que no hay que pensar solo en las cifras, sino también en las “familias duramente golpeadas y en las comunidades afectadas que se quedan sin las personas que luchan por sus derechos”. Seguido a ello, manifestó que estos asesinatos afectan la base de la democracia debido al papel que realizan los líderes sociales en el territorio nacional.
“Se trata de líderes que recogen las inquietudes de la gente, son sus voceros y los que trabajan por un país donde se respeten los derechos humanos”, agregó.
El incremento de estos crímenes encendió las alarmas del organismo de control. La cifra de asesinatos superó los 145 reportados durante 2021 y los 182 del 2020. “El 2022 marcó un lamentable récord de homicidios a los líderes sociales y defensores de derechos humanos, ya que registramos un total de 215 asesinatos”, precisó el líder de la entidad y destacó que los datos superaron a los entregados durante 2016, que llegaron a 133 casos.
En total, entre 2016 y 2022, fueron asesinados 1.113 líderes sociales, a pesar de que hace siete años se firmó el Acuerdo Final de Paz con la extinta guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).
En el actual Gobierno de Gustavo Petro se ha incentivado la política de la Paz Total, que plantea un diálogo con los diferentes actores armados que recrudecen el conflicto armado y terminan afectando a la población colombiana. Eso no implica solo asesinatos, sino también con masacres, secuestros, desplazamiento forzados, confinamiento, entre otros delitos que vulneran el Derecho Internacional Humanitario (DIH).
Al respecto, Camargo afirmó que esperaría que “los diálogos con el ELN —Ejército de Liberación Nacional—y el cese bilateral con otros grupos armados ilegales, signifique también una disminución de las acciones contra líderes y lideresas sociales y personas defensoras de derechos humanos”. Las organizaciones que se están acogiendo a la Paz Total desde Año Nuevo son dos grupos residuales de las disidencias de las Farc, el Clan del Golfo, y Los Pachenca.
Las regiones más afectadas por los crímenes contra los líderes sociales
El SAT registró que la mitad de los homicidios se presentaron en cinco departamentos de Colombia: Nariño (35), Cauca (26), Antioquia (22), Putumayo (22) y Valle del Cauca (12). “Coincide con aquellas zonas del país donde hacen presencia los principales grupos armados ilegales y las organizaciones de crimen organizado”, comentó la Defensoría en un comunicado de prensa y recordó que esos territorios son característicos también por los cultivos de la hoja de coca.
Los homicidios que se presentaron el año anterior también fueron delimitados por el tipo de población afectada. Los líderes comunales fueron los que sufrieron más casos con 63 homicidios, seguidos de los líderes indígenas con 47 víctimas y los líderes comunitarios con 36 casos. También se registraron casos de los líderes campesinos (18), líderes afrodescendientes (12), activistas en derechos humanos (7), activistas culturales o deportivos (5), personas LGBT+ (4) y servidores públicos (3).
