El Cesar sigue brillando a nivel nacional y no precisamente por acciones positivas, sino por el contrario, por casos de corrupción, debido a que entre las alertas que lanzó la Contraloría General de la República una se encuentra en el municipio de Chimichagua, en donde una mujer supuestamente reclamó 172 raciones alimenticias para igual número de hijos.
Es así como el municipio ubicado a orillas de la Ciénaga de la Zapatosa, se encuentra mencionado entre las 69 alertas de la Dirección de Información, Análisis y Reacción Inmediata -DIARI- de la Contraloría General de la República, que analizó la entrega de raciones de alimentos que hicieron contratistas del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) a supuestos beneficiarios durante la pandemia del Covid-19.
Un equipo del DIARI verificó las planillas en físico y encontró que en varios departamentos del país, los tutores de los menores tienen múltiples beneficiarios, generando 6 alertas por 1.970 beneficiarios.
Una de esas alertas es de Chimichagua, en donde una mujer dice ser la madre de 172 hijos y otro en el municipio de Fundación, Magdalena por lo que reclamó raciones para todos ellos.
La DIARI se pregunta qué hicieron con todas estas raciones y lanzó la alerta a fin de que esto no quede en letra muerta.
Pero no solo es Chimichagua, según la Contraloría hay beneficiarios que aparecen como muertos, sin embargos, los contratistas del ICBF le entregaron raciones alimentarias en varios municipios del país.
