Por: Daniela Bernier Pacheco-Pares-
El parque solar JUMI es desarrollado por la empresa Vatia de origen colombiano que desde el año 1998 viene participando en el sector energético como generadora de energía, con presencia en los departamentos de Tolima, Antioquia, Cauca, Meta y Atlántico[1].
Vatía venía generando energía a través de plantas hidroeléctricas (PCHs), pero desde el año 2020 comenzó a generar energía a partir de su primera granja solar y este año inició operaciones el parque solar JUMI ubicado en el municipio de Juan Mina, Atlántico.
Este parque solar se encuentra asentado en 24 hectáreas, en las que se encuentran desplegados 20,852 paneles solares generando 23,860 MWh al año, lo que permite suministrar energía a 12,650 hogares[2].
La entrada en operación de JUMI, de acuerdo con la Unidad de Planeación Minero Energética (UPME), cuenta con una capacidad solar total en operación de 1.917,07 MW y una potencia nominal de 9. 9 MW[3]. Además de la energía que puede suministrar el proyecto, este también impulsa el desarrollo económico local, pues a partir de su puesta en marcha se crearon 133 empleos para la región. Este proyecto se ejecutó en tiempo récord porque a la empresa y a sus aliados solo les tomó 8 meses ponerlo en funcionamiento.
Contribuirá a la reducción de 3.674 toneladas de CO2 al año y un total de 104.07 toneladas de CO2 en su vida útil, lo que sin duda es de vital importancia dado que el Gobierno Nacional, busca la generación de energías limpias que permitan la reducción de Gases de Efecto Invernadero (GEI).
Que proyectos solares de este tipo entren en operación comercial le genera varios beneficios al país; algunos de ellos son la diversificación de la matriz energética, la reducción de la dependencia de energías provenientes de combustibles fósiles y la seguridad energética. Teniendo en cuenta que más del 60% de la energía en Colombia se genera a partir de centrales hidroeléctricas, la seguridad jurídica se puede ver en vilo por las intensas sequías como efecto del cambio climático.
La implementación de este tipo de proyectos ha permitido que el 10% de la energía que se consume en el país provenga de los sistemas fotovoltaicos; así lo anunció el ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, en su cuenta de X[4]. Con este tipo de proyectos, Colombia sigue avanzando en sus compromisos climáticos y en la diversificación de la matriz energética. Se espera que estas cifras sigan creciendo y que la energía solar en el país, así como el mundo, siga avanzando.