De manera oficial, los exjefes del secretariado de la guerrilla de las Farc, admitieron haber secuestrado a civiles y militares, lo cual radicaron ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), la cual en resolución judicial los llamó a responder por ese delito.
El actual senador por el partido Comunes, Julián Gallo, conocido en la extinta guerrilla como ‘Carlos Antonio Lozada’, dijo que asumen como dirección última que fue de las Farc-EP la responsabilidad por ordenas capturas y privación de la libertad de forma prolongada de civiles y de miembros de la fuerza pública.
En el marco del acuerdo de paz, la JEP imputó el pasado 28 de enero a ocho miembros del antiguo secretariado de las Farc por crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra dentro del «Caso 01», donde hay acreditadas 2.107 víctimas de secuestros y crímenes derivados, principalmente entre 1993 y 2012.
Esa Jurisdicción acusó por esos crímenes a: Rodrigo Londoño, quien fue el último jefe de las Farc, y quien actualmente es el presidente del partido Comunes que surgió luego de la desmovilización de esa guerrilla.
De igual modo, a los hoy senadores Julián Gallo y Pablo Catatumbo, y a los exjefes guerrilleros Jaime Alberto Parra, Milton de Jesús Toncel, Juan Hermildo Cabrera (fallecido), Pastor Alape y Rodrigo Granda.
En su respuesta a la JEP, los exjefes guerrilleros aceptaron sus responsabilidades individuales ante las víctimas, y reconocieron que había una política de secuestros a fin de financiar su oposición armada, ganar territorio y usarlo como ficha de cambio.
En rueda de prensa, el senador Gallo reconoció que se dieron situaciones que no debieron suceder, pero que se presentaron, al tiempo que explicó que hubo una política a lo que fueron los secuestros.