La Fiscalía General de la Nación ha confirmado que Rodrigo Tovar Pupo, alias ‘Jorge 40’, y Adriano Sánchez Comas, conocido como ‘Don Joaco’, son los únicos presuntos responsables del asesinato del profesor Roque Morelli, decano de la Facultad de Educación de la Universidad del Magdalena, ocurrido en septiembre de 2002.
Mediante una resolución de acusación proferida por la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos (Fiscalía 228), se establece que el crimen fue motivado por odios ideológicos. La víctima, según los hallazgos del proceso, fue señalada por supuesta afinidad con grupos de izquierda radical, lo que lo convirtió en objetivo del aparato paramilitar que operaba en la región.
La investigación descarta de forma categórica la participación del entonces rector de la Universidad del Magdalena, Carlos Caicedo, quien por más de dos décadas fue vinculado por sus opositores a estos hechos violentos. “La verdad sigue abriéndose paso. Siempre fui inocente. Durante más de 20 años enfrenté amenazas de paramilitares, aliados políticos y sectores empresariales que usan la política como disfraz. Hoy, la Fiscalía confirma lo que siempre denuncié: agentes del Estado y el paramilitarismo son los responsables de los crímenes en la Universidad del Magdalena”, expresó Caicedo a través de sus redes sociales.
El documento judicial también recoge testimonios clave presentados ante el tribunal de Justicia y Paz por exintegrantes de las Autodefensas, incluyendo a Hernán Giraldo Serna y los hermanos Rojas. Entre ellos destaca la declaración de Willinton Mora Buenhaber, exmiembro de las Autodefensas del Magdalena y Guajira (ACMG), quien aseguró que la orden de asesinar a Morelli provenía de una lista entregada por el entonces DAS a los grupos paramilitares.
“Ese hecho fue ordenado por José Gregorio Rojas y la información venía de Hernán Giraldo. La lista fue entregada por Walter Torres a José Gregorio Rojas, quien dijo que había que darle muerte a Roque Morelli, Edwin Riaño y otra persona que no recuerda”, declaró Mora ante la justicia. Con estos nuevos elementos, la Fiscalía confirmó los cargos contra Tovar Pupo, alias ‘Jorge 40’, como comandante de los hermanos Adán y José Rojas, quienes también señalaron a Sánchez Comas como determinador del asesinato.
La resolución refuerza la tesis de que los crímenes en la Universidad del Magdalena fueron parte de una estrategia de persecución ideológica impulsada por sectores armados ilegales en complicidad con agentes estatales.