El gobernador de Bolívar, Yamil Arana Padauí, hizo un llamado urgente al presidente Gustavo Petro para que el Gobierno nacional preste atención inmediata a la grave crisis humanitaria que se vive en el sur del departamento. Según Arana, la situación en esta región es tan crítica como la que atraviesan otras zonas del país, como el Catatumbo, donde recientemente se declaró la Conmoción Interior debido a la violencia y los desplazamientos forzados.
A través de un mensaje en su cuenta de X, el mandatario expresó su solidaridad con las víctimas del Catatumbo, pero destacó que la situación en el sur de Bolívar no puede ser ignorada. «Nuestros municipios del sur necesitan el apoyo del Estado de manera urgente», subrayó Arana, refiriéndose a localidades como Santa Rosa del Sur y Montecristo, que enfrentan altos índices de desplazamiento.
Más de 70 familias han sido obligadas a abandonar sus hogares en las veredas de El Tomate y Minguillo debido a los enfrentamientos armados entre el Clan del Golfo y el Ejército de Liberación Nacional (ELN). La violencia de estos grupos ha puesto a las comunidades en una situación de constante miedo y vulnerabilidad, lo que ha exacerbado una crisis humanitaria en la región.
«Las instituciones locales no tenemos la capacidad para afrontar esta situación por nosotros mismos», agregó el gobernador, al tiempo que hizo un llamado a la intervención urgente del gobierno central. Entre las medidas que ha solicitado Arana están el incremento del pie de fuerza en la región, así como el fortalecimiento de los recursos logísticos y tecnológicos para las fuerzas armadas. Además, el gobernador solicitó la construcción de una base militar en el corregimiento de Mico Ahumado, un proyecto que lleva años siendo demandado por las comunidades locales.
La solicitud del gobernador refleja el creciente temor de que el sur de Bolívar, como otras regiones afectadas por la violencia de grupos armados ilegales, quede atrapado en un círculo vicioso de desplazamientos y abandono estatal si no se implementan medidas urgentes y efectivas para garantizar la seguridad de sus habitantes.
La situación en esta región ha estado fuera del radar mediático, pero el gobernador Arana insiste en que es hora de que el Gobierno nacional mire hacia el sur de Bolívar con la misma atención que se ha dado a otras áreas del país, especialmente en lo que respecta a la crisis humanitaria y el desplazamiento forzado.