LA HUMANIDAD SOSTENIDA EN LOS MÁRGENES DEL MUNDO- Felipe A. Priast

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Estás son vainas de no creer. La única “nación” que toma parte activa para la defensa de Palestina es la Yemén del Norte dominada por los “Houthies”, una etnia Shia apoyada por Irán que decidió bombardear el tráfico marítimo que navega por el Golfo de Aden rumbo a Suez, y quienes han puesto en jaque a los gobiernos de Occidente. No ha sido Rusia, ni China, ni Irán, ni nadie del primer mundo quienes han cogido el testigo y se han lanzado al ataque para hostigar a Israel, han sido los Houthies de Yemén, una etnia que hace un mes casi nadie sabía quiénes eran.

Decía Lord Clark, uno de mis faros más importantes para todo lo cultural, artístico e histórico, que, luego de las invasiones bárbaras del siglo V, la idea de “civilización” se refugió en los márgenes de la Europa anteriormente dominada por el Imperio Romano, casi siempre, de la mano de la Cristiandad, quien protegió la idea de civilización mientras los alanos, los godos, los hunos y demás pueblos bárbaros tumbaban los remanentes de la cultura Romana con furia. Sitios como la isla de Skellig Michael, en Irlanda; el norte de España habitado por vascos y astures; islas del mediterráneo aquí y allá. Y la historia apenas empezó a cambiar con el convertimiento al cristianismo de esos mismos pueblos bárbaros destructores, en especial, con la emergencia de Carlos Martel y Carlomagno quienes consolidaron su reino franco de la mano de la Iglesia, una lección que todos los ateos y desecradores de la fe católica olvidan hoy en día. Fue gracias a la Iglesia Católica que hoy no hablamos mongol, o búlgaro, o quién sabe qué otra lengua bárbara venida del este.

Pues bien, esa circunstancia de hace 1,500 años parece estar volviendo a repetirse, solo que ahora los que se creen civilizados son los bárbaros, y los custodios del buen sentido de la Humanidad son los países de la periferia, los países en los márgenes del Primer Mundo. Países como Yemén, que de casi ser exterminados por los Sunnis respaldados por Saudí Arabia, han pasado a defensores de los Palestinos. Presidentes de países del Tercer Mundo como Petro, quien con su gran sentido de la Humanidad fue uno de los primeros mandatarios mundiales en oponerse al genocidio palestino perpetrado por los israelíes en Gaza. Países de la África Negra, como Surafrica, quienes han tenido el coraje de radicar una demanda por genocidio con la CPI contra Israel por su crimen. Países como Bolivia, que ha suspendido relaciones con Israel a causa de este mismo crimen. Países diminutos del Pacífico como Tonga o Fidji, que suscriben un pacto de existencia sostenible con cero emisiones de combustibles fósiles. La civilización ya no queda en donde todo el mundo creía que quedaba. La civilización futura está emergiendo en los márgenes del Primer Mundo en lugares como Fidji, Sur África, o Colombia (al menos la Colombia progresista).

Mientras las naciones desarrolladas, los nuevos bárbaros, hacen un esfuerzo por no matarse con armas nucleares, en los márgenes de esa supuesta civilización emerge la verdadera civilización. Y si los israelitas no han exterminado por completo a los palestinos de Gaza, es gracias a estos paises en los márgenes, quienes les han mostrado al mundo una nueva forma de convivir con el prójimo y la naturaleza.

Cada día que pasa yo me convenzo más y más de que la noción del progreso de Occidente, y lo que hoy consideramos “civilización”, es el verdadero barbarismo. Que infamias como el poder nuclear, el armamentismo desmedido y tecnologías perversas como la Inteligencia Artificial, son el verdadero enemigo, que de allí yo va a venir nada bueno y que, en un futuro muy cercano, los habitantes de los márgenes de ese primer mundo se van a tener que armar de valor para detener a estas bestias inhumanas de mente binaria que nos van a extinguir a todos en este planeta, humanos y animales por igual. Detener a Occidente y su locura desatada es la ÚNICA ALTERNATIVA QUE TENDREMOS, y los líderes de esa nueva civilización humanista emergente no vendrán de Estados Unidos, Francia o Alemania, vendrán de esos márgenes despreciados por el primer mundo.

Quiero felicitar al presidente Petro por haber adherido a la demanda por genocidio contra Israel radicada por el gobierno de Suráfrica. Ese es el camino, es por ahí, no se equivoquen.

Creo que ha llegado el momento de que el Tercer Mundo pase a ser el “Primero”, y que los bárbaros del dizque “Primer Mundo” empiecen a viajar en vagones de cuarta. El que crea que este planeta le pertenece solamente a Estados Unidos o Gran Bretaña es un imbécil. ¡ESTE PLANETA ES SUYO!!, viva usted en Malagana, Bolívar; Timbuktu, Malí; o Antananarivo, Madagascar.

Y lamento tener que decirles esto, mis queridos compatriotas del Tercer Mundo, pero, más temprano que tarde, ustedes van a tener que llenarse de valor para volverse activistas que detengan a estos “bárbaros” del Primer Mundo.

Colombia no debió adherir a Sur África, DEBIÓ DEMANDAR TAMBIÉN A ISRAEL POR SU CUENTA, para que las demandas fueran múltiples.

Y así es que va a tocar de aquí para adelante. Una coalición de pueblos humanistas, conservacionistas y pacíficos, tendrán que unirse cada vez más para oponerse a los atropellos de las bestias del Primer Mundo. Cada que vez que una nación abusiva del Primer Mundo le ofrezca muerte y destrucción a algún pueblo, el resto del mundo humanista y pacifista debe unirse para oponérseles. Cada vez que pase, no solo en esta instancia de Gaza, hasta que los bárbaros del Primer Mundo entren en razón.

No se equivoquen. Ustedes ven pobreza, inseguridad, crimen callejero y desesperanza en nuestros países, pero la Humanidad no se va a extinguir por algo que hizo una pandilla en Ecuador, o por los desmanes de un dictador en África. Los que van a acabar con este mundo hablan en inglés, alemán y francés, no en Lingala o Wayuu.

Somos la “reserva humana” de este planeta, y ha llegado la hora de usar esa reserva con un buen propósito.

Además, la barbarie ya está consumiendo a los bárbaros. Al día de hoy, más de 4 mil soldados israelíes han solicitado ayuda psicológica a causa de la Guerra en Gaza.

Matar mujeres y niños acaba volviendo loco al más cuerdo.

Israel está pegado con las babas en estos momentos. Cometer ese crimen atroz que ellos están cometiendo tiene que estar comiéndose el alma a todos sus habitantes.

Por eso, por cierto, es que al cabo de un tiempo los bárbaros abrazan la religión y se convierten.

Esa es la especialidad de la religión: recoger del piso almas atormentadas…


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