Según el diccionario de la Lengua española, la palabra LIBERTAD significa: Estado de la persona que no está presa, ni sujeta a la voluntad de otra. Capacidad o facultad que tiene una persona para decidir si quiere o no hacer algo.
No concibo ¡POR DIOS! que haya un costeño que opte por respaldar al candidato que representa la guerra, el terror en este país; nosotros por naturaleza, no somos bélicos, somos pacifistas y por ser pacifistas y de buen corazón, unos foráneos se adueñaron de la mayoría de nuestras tierras y sembraron el terror en la mayoría de nuestras familias; aún permanecen en nuestra memoria las masacres de: El Chengue; El Salado y Macayepo, por mencionar unas, de las más de 400 que hicieron en nuestra región los foráneos que se adueñaron de nuestras tierras.
Hace algunos años, en el programa “Los informantes” del Canal Caracol, tuvimos conocimiento de la ola de terror, que por más de 10 años, vivieron los habitantes de Libertad un corregimiento del Municipio de San Onofre en el Departamento de Sucre incrustado en las orillas del Mar Caribe.
Más de 50 niñas, la mayoría menores de 14 años, fueron violadas por un solo tipo originario del interior del país; además de asesinar a muchos hombres y mujeres de esa zona, sus habitantes tenían que hacer lo que él ordenara; es decir, vivían en Libertad el caserío, pero no gozaban de libertad; en el programa, una de las víctimas narró que en una ocasión una muchacha fue azotada en plena plaza pública a la vista de todos los habitantes del pueblo, porque se seguía encontrando con su novio de toda la vida.
Al ver las imágenes del pueblo en la televisión, pude observar que ahí ya no hay pobreza ¡no señor! los paramilitares la erradicaron, ahí lo que hay es miseria y de la buena; que desgracia para nosotros los costeños que en vez de construirnos obras que mejoren nuestra calidad de vida, tengamos que vivir humillados en nuestra propia tierra; en ese pueblito, según las imágenes televisivas, se ve que no hay agua, alcantarillado, vías, escuelas, no hay nada de eso, pero ¡si paramilitares!
¿En dónde estaba la Fuerza Pública en ese entonces? ¿En los más de 10 años que duró ese calvario para esa pobre gente, nunca tuvieron conocimiento de esa situación, nuestros generales y comandantes de estación? El terror paramilitar es el que se avecina, o mejor dicho ya está en marcha; en muchos pueblos de la costa donde ganó DUQUE, los paramilitares coaccionaron a sus habitantes para que votaran por el candidato de Uribe, su patrón por excelencia.
La costa, para su desarrollo, no requiere paramilitares, ni incremento de la Fuerza Pública, lo que demanda es que Municipios como: San Onofre; San Juan Nepomuceno; San Jacinto o Mahates, mejoren su calidad de vida ¿Cómo es posible que en pleno SIGLO XXI, esos pueblos no cuenten con agua potable y el servicio de energía sea deficiente?
Con excepción de Valledupar, que es la que saca la cara por la costa, no hay una capital costeña que sea la excepción en pobreza y miseria; Cartagena es la que lleva la batuta a pesar del renombre que tiene a nivel internacional, allá las pandillas están de moda, hay mucha exclusión social ¿Si no hay Oportunidad de ninguna naturaleza para sus habitantes, que les toca hacer, en un país en donde todo está privatizado?
No es matando a los jóvenes como se combate la delincuencia en Colombia, se acaba este flagelo, siguiendo el ejemplo de ex gobernantes como GUSTAVO PETRO; cuando estuvo en la Alcaldía de Bogotá creo los CAMAD para atender a toxicómanos y habitantes de la calle, dándoles el tratamiento, no como criminales, sino, como drogadictos y enfermos que necesitaban la atención del Estado.