Es menester para adentrarnos en este artículo, conocer un poco sobre Rómulo y Remo fundadores de Roma “Dice la leyenda que Ascanio, hijo del héroe troyano Eneas (hijo de Venus y de Anquises), habría fundado la ciudad de Alba Longa sobre la orilla derecha del río Tíber. Sobre esta ciudad latina reinaron muchos de sus descendientes hasta llegar a Numitor y a su hermano Amulio. Éste destronó a Numitor y, para que no pudiese tener descendencia que le disputase el trono, condenó a su hija, Rea Silvia, a ser sacerdotisa de la diosa Vesta para que permaneciese virgen.
A pesar de ello, Marte, el dios de la guerra, engendró en Rea Silvia a los mellizos Rómulo y Remo. Cuando éstos nacieron y para salvarlos fueron arrojados al Tíber dentro de una canasta que encalló en la zona de las siete colinas situada cerca de la desembocadura del Tíber, en el mar.
Una loba, llamada Luperca, se acercó a beber y les recogió y amamantó en su guarida del Monte Palatino hasta que, finalmente, les encontró y rescató un pastor cuya mujer los crió. Ya adultos, los mellizos repusieron a Numitor en el trono de Alba Longa y fundaron, como colonia de ésta, una ciudad en la ribera derecha del Tíber, en el lugar donde habían sido amamantados por la loba, para ser sus Reyes.
Se dice que la loba que amamantó a Rómulo y Remo fue su madre adoptiva humana. El término loba, en latín lupa, también era utilizado, en sentido despectivo, para las prostitutas de la época.” En este caso, los Rómulos y Remos, no son propiamente recuperadores de tronos, sino todo lo contrario; son aquellos hijos del Pueblo (La Loba), bañados de egoísmo, sesgos, acaparamiento, corrupción, quienes ejercen una carrera de trabadillas, manipulación, persecución, arribismo y envidia, frente a sus hermanos que son sus paisanos y que por circunstancia de la vida ejercen funciones Públicas, y son a diario víctimas de los hijos del Pueblo, que no convergen, no se suman al desarrollo aportando ideas, sino que están pendientes de la forma para enlodar la labor de la persona que se encuentra a cargo de dicha entidad.
Lo irónico de todo esto, es que logran adquirir relaciones políticas a nivel Departamental, Nacional; y en vez de orquestar gestión a favor del municipio o la entidad, lo que hacen de forma maquiavélica es utilizar estos contactos para orquestar planes en contra del funcionario y a su vez del Municipio, e impedir la gobernabilidad, se dan golpes de pecho intentando demostrar que ejercen control político y realizando gestión; cuando realmente viven es indisponiendo con los funcionarios de altos cargos del Gobierno Nacional y Departamental, obstaculizando el desarrollo de la función pública.
Una comunidad no depende solamente del gobernante de turno; sino de todas sus fuerzas vivas, y en ella la solidaridad de un desarrollo sostenible, de intentar que se presten de la mejor forma los servicios públicos, abrir canales para un dialogo directo con el Pueblo, para que el mandatario, recepcione bancos de soluciones, por parte del conglomerado, y de esta forma poder encaminar gestiones para la solución a las diversas problemáticas que nos afectan.
El Departamento del Cesar, es un claro ejemplo de este artículo, donde se evidencia todas estas manadas de malos hijos y malas hijas, que a pesar que pueden gestionar para su región innumerables proyectos o ayudas se abstienen toda vez que el mandatario de turno no es de sus toldas, pero si ejercen presión para que escudriñen sus actos hasta que logren conseguir alguna falta.
Que armonía se denota en la Antioquia vanguardista en su perla Medellín, donde muy a pesar de las diferentes ideologías políticas y posturas polarizadas, tienen sentido de pertenencia, estos Romulos y estos Remos, sienten y pregonan orgullosos un cariño aparte por su región, por sus finanzas y por su gente.
Aquí más allá de quien figure o que partido gobierne, aquí se gobierna una comunidad, envidia de la buena genera una región como la Antioquia, donde a pesar de sus diferencias todos se unen para verla siempre grande y bella.