El ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, es quizá uno de los hombres más polémicos que hacen parte del gabinete Iván Duque, esto debido a los escándalos en los que se ha visto envuelto relacionados con los “bonos de agua”, y las medidas que ha impulsado su cartera para la financiación del Estado, como la iniciativa que busca gravar con IVA los productos de la canasta familiar.
Semanas atrás se rumoraba que Carrasquilla dejaría el cargo, comentario que él mismo desmintió asegurando que los primeros días de 2019 presentaría varias propuestas que aportarían al mejoramiento de las finanzas del país.
Este sábado se publicó la nueva columna de Daniel Coronell y en ella explica que algunos familiares del ministro Carrasquilla ya tienen puestos en el Gobierno; su esposa, Clara Parra Beltrán, ocupa la alta Consejería presidencial para la Competitividad y el Sector Privado, y su cuñado, Andrés Parra Beltrán, se posesionó a finales de noviembre como subgerente de Estructuración del Fondo de Adaptación.
En ese sentido, el periodista le formuló varias preguntas al ministro de Hacienda respecto a los cargos que ocupan sus familiares, cuestionamiento que al parecer causó disgusto en Carrasquilla, toda vez que aseguró que los cargos que ostentan su esposa y su cuñado no obedecen a un regalo.
“Me enfurecería tal cosa si se tratara de un regalo ajeno a los méritos”, afirmó Alberto.
Pero como indicó Coronell, el tema del cargo de su cuñado Andrés Parra no es si tiene o no los méritos para ocuparlo, porque, según lo dicho por el Ministro, este ya había trabajado con el Fondo de Adaptación. El problema en este caso es ético, teniendo en cuenta que la división en la que se desempeña como subdirector, es una dependencia del Ministerio de Hacienda, siendo un área que ha manejado un presupuesto que supera los 7 billones de pesos, y que para el próximo año le serán asignados 700.000 millones.
Igualmente Daniel recuerda que Alberto está estrechamente ligado a esta división, ya que se ha encargado de numerosos proyectos de acueducto y alcantarillado en varios municipios del país, tema que es ampliamente de su conocimiento, debido a que por este tema fue que se le cuestionó por los bonos de agua.
Según el columnista, la esposa de Carrasquilla también faltaría a la ética profesional ocupando el cargo de alta consejera presidencial, ya que de igual manera se vio envuelta en el escándalo de los bonos, siendo parte de la junta directiva de la empresa Konfigura, vinculada a la creación de estos mecanismos de financiación para los municipios del país.
Para el funcionario ninguno de estos temas representa un impedimento para que sus familiares ostenten los cargos en los que están en la actualidad, toda vez que, como él mismo respondió a Daniel Coronell, reúnen las condiciones para servirle al país: “1. Preparación académica y experiencia en el campo respectivo; y 2. Paciencia para aguantar las andanadas del periodismo “investigativo” que, con tal de facturar alguito está dispuesto a acabarle la carrera al que sea”. Fuente consultada: columna de Coronell revista Semana.