
En el marco de las directrices del presidente Gustavo Petro para restaurar la tranquilidad en el Catatumbo, Norte de Santander, el Ejército Nacional ha logrado avances significativos en la región. A través de operaciones militares, se recuperaron 20 menores de edad, se sometieron a la justicia 84 integrantes de las disidencias de las Farc y se incautó un importante arsenal de guerra.
El presidente Gustavo Petro, en su cuenta de X, destacó los logros obtenidos: “Del frente 33 se han desmovilizado 104 personas con sus fusiles. No son derrotados. Son jóvenes que saben que la guerra no puede ser eterna en Colombia. Que en Colombia lo que vale la pena es pelear por la vida”. Entre los desmovilizados se encontraban integrantes del Grupo Armado Organizado residual, Bloque Magdalena Medio, Estructura 33. Los menores rescatados iniciaron la ruta de restablecimiento de derechos, como parte de las acciones para proteger a la población infantil del reclutamiento forzado.
DECOMISO DE MATERIAL DE GUERRA
En la zona rural de Tibú, tropas de la Segunda División del Ejército lograron incautar un arsenal compuesto por: 55 armas largas, 2 ametralladoras y 1 fusil de francotirador, 25 pistolas, 80 granadas de mortero, Una tonelada de explosivos, 300 minas antipersonales, 20.327 municiones de diferentes calibres y Material de intendencia y comunicaciones. El Ejército destacó en un comunicado que esta incautación afecta considerablemente las capacidades delictivas de las disidencias, disminuyendo las confrontaciones armadas que afectan a la población civil.
Tras estos avances, el Ejército Nacional ha intensificado sus esfuerzos para promover la desmovilización de los grupos armados al margen de la ley. Con el apoyo del Batallón de Movilidad y Maniobra de Aviación N.2, se han distribuido volantes desde helicópteros en zonas de operación, invitando a los integrantes del GAO Eln a acogerse al Programa de Atención al Desmovilizado (GAHD). 27Esta estrategia busca garantizar que los desmovilizados puedan reintegrarse a la sociedad y contribuir al desarrollo social y económico de sus regiones. Además, el Gobierno reafirma su compromiso de construir una paz duradera en el Catatumbo y en toda Colombia, ofreciendo oportunidades de vida legal y digna para quienes abandonen la guerra.