El ministro de Justicia, Néstor Osuna, ha emitido una alerta sobre una serie de incidentes violentos que han afectado a los funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) en diferentes regiones del país en los últimos meses. El caso más reciente ocurrió el Valledupar, donde el guardián Diego Torres Lemus, fue asesinado luego de cumplir su jornada laboral en la Penitenciaría de Alta y Mediana Seguridad.
Según el ministro, se ha registrado un aumento notable de amenazas contra la vida e integridad de los funcionarios que desempeñan labores de custodia y vigilancia en el Inpec, incluso el director de la institución, el Coronel Gutiérrez, ha sido objeto de estas amenazas.
El sindicato de trabajadores de centros penitenciarios (UTC) había advertido sobre un presunto plan para atacar a los uniformados, y la denuncia se difundió a través de panfletos en distintas ciudades. Además, Sebastián Carrillo Ochoa, otro miembro del cuerpo de custodia del Inpec, lleva más de tres meses desaparecido.
El ministro Osuna se mostró firme en su condena a estos actos violentos y subrayó que tales sucesos han cobrado fuerza a medida que se implementan estrategias para combatir la corrupción en el sistema carcelario y delitos como la extorsión perpetrada desde los centros penitenciarios.
El funcionario advirtió que estas situaciones podrían estar relacionadas con la estrategia novedosa que el gobierno ha implementado para luchar contra la corrupción y la extorsión en las cárceles. «Estamos pisando callos de estructuras criminales poderosas y también de funcionarios del Inpec que se han dejado corromper y que son cómplices o partícipes de esos actos de corrupción”, afirmó.
Asimismo hizo hincapié en que la mayoría de los funcionarios del Inpec son víctimas de la combinación entre la criminalidad y la corrupción que afecta a algunos de sus compañeros. Destacó que la representación sindical se opone a estas prácticas y se compromete a seguir trabajando en la lucha contra la extorsión y la corrupción.
También Osuna remarcó que los funcionarios del Inpec son servidores públicos de vital importancia para la sociedad y que merecen el apoyo y reconocimiento. Hizo un llamado a respaldar especialmente a aquellos que desempeñan labores de seguridad y vigilancia en los centros penitenciarios. “No puede ser que en nuestra sociedad haya muertos de mayor categoría que otros”, subrayó.
Resaltó la importancia de entender que un ataque contra un funcionario del Inpec es como un ataque a un miembro de la familia, ya que están protegiendo y sirviendo a la comunidad de manera similar a los miembros de la Policía y las Fuerzas Militares.
Para abordar esta problemática, el Ministro anunció que se implementarán estrategias de choque, que incluirán un refuerzo de la seguridad para los servidores del Inpec.
Además, en colaboración con el ministro de Defensa, Iván Velásquez, se convocará a un consejo de seguridad para revisar estrategias y acciones que permitan enfrentar esta creciente ola de inseguridad y criminalidad.
En un gesto de respaldo y solidaridad, el gobierno acompañará las marchas convocadas por los funcionarios del Inpec, las cuales tendrán lugar el jueves, con el fin de reclamar medidas para garantizar su vida y seguridad.