Redacción: Laregional.net
Molestos están los habitantes en el municipio de San Andrés de Sotavento, debido a que la administración municipal cerró el comercio, pero permitió la realización de una fiesta de baby shower para homenajear la llegada del bebé del asesor jurídico, celebración a la que asistieron personas de esa población y sus alrededores.
Según el portal de noticias La Lengua Caribe, el comercio debió someterse al cierre durante las horas de la noche para contener la pandemia por Covid-19, pero no ocurrió lo mismo con las fiestas privadas, entre esas la del baby shower de la esposa del asesor jurídico.
Según ese portal, a la fiesta acudieron funcionarios de la alcaldía de San Andrés y de Tuchín, por lo que la comunidad y en especial los comerciantes están indignados, debido a que a ellos les impiden trabajar, para evitar aglomeraciones, pero los funcionarios públicos sí se pueden reunirse para celebrar.
La alcaldía en días pasados emitió el decreto 0101 que ordena el cierre desde las 10:00 de la noche del viernes 26, hasta las 10:00 de la mañana del sábado 27 y así sucesivamente hasta el lunes 1° de marzo, por lo que no conciben que los funcionarios sí se puedan reunir.
Según lo publicado por el portal web, la celebración tuvo lugar en un reconocido restaurante del municipio, el cual sería de propiedad del gerente del hospital de la localidad.
Ante este tipo de hechos, los comerciantes hicieron un llamado al Gobierno Departamental y a la Procuraduría General de la Nación para que se tomen cartas en el asunto.