La protocolización de la consulta previa es un hito significativo para el desarrollo una granja de generación solar prevista en el corregimiento de La Mesa, en Valledupar, con capacidad de 100 MW, lo que significa abastecer de energía a más de 105.000 hogares. La construcción estará a cargo de Celsia a través de su filial EPSA.
Los acuerdos alcanzados contemplan apoyos a las tradiciones ancestrales y espirituales de los pueblos indígenas de esta zona como también medidas ambientales, socioeconómicas y culturales para su región.
Este proyecto se desarrollará en un área que se encuentra al interior de la llamada ‘Línea negra’ o límite ancestral de los pueblos indígenas: Koguis, Arhuacos, Wiwas y Kankuamos de la Sierra Nevada de Santa Marta. Por este motivo se debió adelantar el proceso de consulta previa con estos cuatro pueblos indígenas.
Los acuerdos concertados contemplan apoyos a las tradiciones ancestrales y espirituales, como también medidas ambientales, socioeconómicas y culturales. Algunos son:
Se apoyarán programas de enseñanza y difusión del conocimiento tradicional en los principales sitios sagrados de los pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Se construirán dos Kankurwas (espacios sagrados exclusivos para la realización de ceremonias) para los apoyos espirituales y culturales definidos para el proyecto.
Se continuarán con las actividades espirituales en los sitios sagrados identificados por los sabios ancestrales (Mamos) en el área de influencia, con el fin de lograr un equilibrio entre la madre tierra y el proyecto.
Se hará el saneamiento de los sitios sagrados por medio de un programa de fortalecimiento territorial que será llevado a cabo por los cuatro pueblos indígenas. Dicho programa busca proteger a la Sierra de proyectos que no sean amigables con el medio ambiente o con las comunidades ancestrales que habitan en él.
Se involucrará a un integrante de la comunidad indígena para que haga acompañamiento durante la fase de construcción con el fin de identificar si hay materiales sagrados o vestigios antiguos en la zona.
Para fortalecer la organización indígena y como parte de los beneficios del proyecto, la compañía instalará paneles solares en algunas casas indígenas de Valledupar y Pueblo Bello, que permitan la autogeneración de energía eléctrica.
Se llevará a cabo un plan de compensación forestal para conservar las plantas que los pueblos indígenas identifiquen como medicinales o de uso cultural. También se ejecutará un plan de protección de los bosques y los suelos.