El Tribunal de Justicia y Paz de Barranquilla, rechazó este miércoles la designación de Salvatore Mancuso como gestor de paz, con la que podría verse beneficiado de una excarcelación, que atentaría contra el derecho de las víctimas.
El juez del Tribunal, Carlos Andrés Pérez, sostuvo que esta designación vulnera la Constitución y trae consigo una suerte de «indulto» que solo es aplicable a delitos políticos.
En la práctica, apunta, supondría dejar sin efecto en la treintena de órdenes de detención contra Mancuso que ese mismo tribunal ha emitido por su presunta responsabilidad en más de 34.700 hechos delictivos durante su pasado paramilitar.
Pérez ha descartado la petición de la defensa ya que Mancuso al no formar parte de estos grupos armados no puede beneficiarse de esta figura, que actúa como una suerte de intermediaria entre las autoridades y los grupos armados para solucionar el conflicto armado interno y en último caso la desmovilización de estos.
En este sentido, el magistrado cuestiona que Mancuso pueda servir de intermediario ya que el grupo armado que lideró, las Autodefensas Unidas de Colombia, se desmovilizaron oficialmente en 2006. Asimismo, considera que la designación por parte del presidente, Gustavo Petro, no se ajustó a la norma y que el papel que Mancuso debería representar es ambiguo ya que se desconoce en qué cuestiones está participando.
Mancuso se encuentra en la cárcel de La Picota, en Bogotá, después de que llegara al país procedente de Estados Unidos, donde se encontraba cumpliendo una pena de prisión por narcotráfico, si bien una vez cumplida su condena ha estado estos últimos dos retenido a la espera de su extradición.
